De un amigo ciclista

¿Qué es lo que me pasa? ¿Por qué esta necesidad? ¿Por qué tengo esta sensación de dar las gracias a los conductores que solo hacen lo que tienen que hacer? Estamos tan acostumbrados a estar a la defensiva, siempre alertas, a esquivar, que cuando un conductor sencillamente respeta nuestros derechos como vehículo creemos que debemos agradecerle. 

Me encontré con un camión que no se me cerró, no se me pegó tratando de apresurarme, no sonó su boncina, y sentí una especie de lazo de amistad, tal vez fué una relación tan corta como una estrella fugaz, de solo un instante, que tal vez no la vaya a evocar jamás de mi memoria, pero que sin duda guardaré en ella con una gran sonrisa, como un recuerdo liberador de endorfinas. 

Los ciclistas, tan olvidados, tan pequeños, tan frágiles y silenciosos como mosquitos en una jungla llena de rinocerontes de acero, estamos tan acostumbrados a la falta de respeto que agradecemos cuando un condutor hace lo que debe. Espero que algún día la falta de respeto termine, pero no el agradecimiento por quienes favorecen la convicencia vial.

Dr. Darkbrain